INTRODUCCIÓN
¿EXISTE LA NACIÓN ANDALUZA?
No se pueden afirmar las cosas alegremente. Por tanto, en este texto intentaré dar datos que confirmen la existencia de una nación andaluza, siempre bajo el punto de vista de quien lo escribe, que no tiene por qué ser compartido por todos aquellos que lo lean. Quisiera empezar con una pequeña introducción histórica del movimiento andalucista a fin de introducir mejor el tema.
No se pueden afirmar las cosas alegremente. Por tanto, en este texto intentaré dar datos que confirmen la existencia de una nación andaluza, siempre bajo el punto de vista de quien lo escribe, que no tiene por qué ser compartido por todos aquellos que lo lean. Quisiera empezar con una pequeña introducción histórica del movimiento andalucista a fin de introducir mejor el tema.
El nacionalismo andaluz hunde sus raíces en las décadas centrales del siglo XIX. Durante el reinado de Isabel II ya se empieza a desarrollar un fuerte movimiento obrero rural, que daría como resultado un arraigo significativo de las teorías anarquistas. Tras la caída de la I República, se creó en Antequera una Constitución, que proclamaba Andalucía como una República cantonal, aunque nunca fue reconocida. El texto es conocido como Constitución Federal de Antequera (1883).
El primer momento verdaderamente importante en el que toma cuerpo el movimiento nacionalista andaluz tiene lugar a principios del siglo XX con Blas Infante. Suyo es el Ideal Andaluz de 1915. Poco después, en 1918 se celebró la Asamblea de Ronda, y en 1919 se redactó el Manifiesto Andalucista de Córdoba. El primer Estatuto de Autonomía para Andalucía se redactó durante la II República, pero la Guerra Civil impidió su ratificación. Tras un silencio de cuarenta años impuesto por la dictadura, el movimiento resurge con la fundación del Partido Socialista de Andalucía (PSA), liderado por Alejandro Rojas Marcos, formación que después pasaría a llamarse Partido Andalucista (PA). En 1980 tiene lugar el referéndum para la Autonomía de Andalucía, que sale rechazado porque Almería no dio el apoyo suficiente, y la vía de acceso del artículo 151 de la Constitución exigía que las ocho provincias tuviesen más del 50% de votos afirmativos. No obstante, tras el Pacto de Carmona, en 1981 se reconoce la autonomía de Andalucía.
El primer momento verdaderamente importante en el que toma cuerpo el movimiento nacionalista andaluz tiene lugar a principios del siglo XX con Blas Infante. Suyo es el Ideal Andaluz de 1915. Poco después, en 1918 se celebró la Asamblea de Ronda, y en 1919 se redactó el Manifiesto Andalucista de Córdoba. El primer Estatuto de Autonomía para Andalucía se redactó durante la II República, pero la Guerra Civil impidió su ratificación. Tras un silencio de cuarenta años impuesto por la dictadura, el movimiento resurge con la fundación del Partido Socialista de Andalucía (PSA), liderado por Alejandro Rojas Marcos, formación que después pasaría a llamarse Partido Andalucista (PA). En 1980 tiene lugar el referéndum para la Autonomía de Andalucía, que sale rechazado porque Almería no dio el apoyo suficiente, y la vía de acceso del artículo 151 de la Constitución exigía que las ocho provincias tuviesen más del 50% de votos afirmativos. No obstante, tras el Pacto de Carmona, en 1981 se reconoce la autonomía de Andalucía.
El ascenso del PA fue continuado en los años 80 y principios de los 90, hasta que se produjo un fuerte declive. Inmediatamente después se produce una escisión del ala izquierda, que refunda el PSA. Actualmente, el nacionalismo andaluz cuenta con un tercer partido, la Confederación Unitaria de Trabajadores-Bloque Andaluz de Izquierdas (CUT-BAI), aunque ninguno de ellos está presente en el Congreso de los Diputados, y sólo el PA tiene representación en el Parlamento Autonómico.
